fragmento asíncrono

LAS RAZONES DE UN LEVANTAMIENTO INDIGENA

La calamitosa situación que continua padeciendo la inmensa mayoría de la población indígena, se ha prestado, se presta y se seguirá prestando, no solo para un levantamiento, sino para una verdadera revolución, que es ese Amaru de mil cabezas, la hidrade la revolución, el que siempre ha aparecido atrás de cada levantamiento en el pasado, y es a ello, que la burguesía, la gamonalidad terrateniente y los gobiernos títeres de turno, han buscado frenar y conjurar a toda costa, ya sea mediante la concertación, el engaño, la división o con la represión pura ysimple a “manu militari”.

Las siguientes estadísticas de organismos oficialesnacionales e internacionales, dan cuenta de la inmensa injusticia que padece lapoblación indígena en el Ecuador, que es parecida o igual a la que padeceninmensas poblaciones en la región andina, americana e incluso a nivel mundial:

“En el país, las mediciones más recientesde NBI corresponden al período 1995-1999 y provienen de las 'Encuestas de condiciones de vida' compiladas por el INEC siguiendo una metodología del Banco Mundial. Según estas cifras, más de la mitad de la población ecuatorianano tiene satisfechas una o más de las necesidades básicas indicadas ... En 1999,la población con necesidades básicas insatisfechas en las ciudades era elevada: casi 4 de cada 10 residentes urbanos sufrían de privaciones; en las áreas rurales, la proporción era el doble. En todo el país, la magnitud de la población en situación de pobreza medida según NBI era del 53%. La pobreza entre los indígenas en Ecuador escerca de 87 por ciento y alcanza 96 por ciento en las sierras rurales”.

En estas condiciones, la población indígena desde los años 90 y atendiendo a una oleada internacional generada por la así llamada Campaña por los 500 años de resistencia indígena, se ha convertido a lo largo de todala década en el actor principal de las reclamaciones en contra de las políticas fondomonetaristas de ajuste de la economía. En ese decurrir ha ido surgiendo un poderoso movimiento indígena con identidad organizativa, política e ideológica.

Este movimiento lo ha liderado la Confederación deNacionalidades y Pueblos Indígenas del Ecuador – CONAIE, que convoca en sus filas a poderosas confederaciones regionales, especialmente de la región sierra, en donde se asienta el grueso de la población indígena, de origen étnico kichwa, que históricamente en el conjunto de los andes, ha mantenido unatenaz oposición al colonialismo blanco-europeo en la Colonia , así como a laexplotación y marginación de los sectores blanco-mestizos en la época Republicana y más recientemente a la ingerencia del imperialismo norteamericano.

En este proceso se han desarrollado formas propias de lucha, entre ellas las movilizaciones, así como el llamado levantamiento indígena, que trasunta desde épocas coloniales en el cual, la población indígena se levantaba y asaltaba de manera sangrienta las haciendas y luego los centros poblados, así como sangrienta era la respuesta permanente de los mismoshacendados, de la población blanca-mestiza y del ejército estatal; en la época contemporánea el levantamiento se dirigía a la toma y posesión de haciendas, pero mas recientemente, el levantamiento se vuelve a manifestar de maneramasiva en demanda ya no sólo de tierra, sino de reclamaciones sociales, económicasy políticas.

Así las plataformas de los levantamientos de la década del90 van volviéndose al reclamo de la solución de conflictos de tierra, peroasumen igualmente la demanda por una educación propia, infraestructura, políticas de desarrollo, e institucionalidades propias.

En su forma el levantamiento se produce especialmente en medio de las política de ajuste fondomonetarista y tiene en gran medida una dosis de espontaneidad, es decir es un conjunto de factores fundamentalmenteeco nómicos provocados por las medidas de shock de los gobiernos neoliberales, que provocan el rechazo generalizado de la población y en medio de ellos el levantamientoes la respuesta automática, las asambleas de organizaciones provinciales, cantonales,parroqui ales y comunales, son las que inician siempre el levantamiento, luegolas marchas en las cabeceras citadinas, para pasar a movilizaciones y porultimo cierre de vías, es en esta fase que aparece el liderazgo dirigencial de la CONAIE que en mucho seremite a concentrar y coordinar el levantamiento espontáneo del pueblo indígena,a estructurar una plataforma programática nacional y coordinar acciones a nivelnacional con otros sectores sociales, así como en los momentospost- levantamiento a generar condiciones de diálogo y negociación con lasinstancias estatales y gubernamentales.

Un salto cualitativo en este proceso se da con la estructuració ndel Movimiento de Unidad Plurinacional Pachakutik Nuevo País, como amalgama de fuerzasde los llamados movimientos sociales, el movimiento indígena y la nacienteexpresió n de los llamados movimientos ciudadanos. Lo cual si bienelectoralmente le catapulta de manera inmediata a ser la tercera fuerzapolítica nacional en las elecciones, mediatamente le descuadra ideológicamentedel proyecto indio, esto es la recuperación de la organización y el podercomunitario en base a una activa reclamación desde la cultura y laterritorialidad, le imposibilita convertirse en un partido de los mejorescuadros y dirigentes indígenas y deviene en mucho en una estructura puramenteelectoral.

El levantamiento a lo largo de la década, por últimodeviene en la llamada 'toma de Quito' al calor de la lucha delmovimiento indígena de Cotopaxi (cercano en 1 hora en carro a la capital de la República ), miles decomunidades deciden avanzar sobre la capital, utilizando medios precarios,camioneta s, buses cantorales y parroquiales, incluso a pie, se trasladancargados enseres y provisiones y se atrincheran en parques céntricos de Quito,la comunicación televisiva hace que mayores sectores se solidaricen en lamovilizació n al igual que importantes sectores populares de Quito plieguen conayuda económica y solidaridad moral, pues era en ese momento la única fuerzavisible de contención a las arremetidas neoliberales.

Entre la gente indígena hay un difuso sentimiento deimportancia del cometimiento de una acción trascendente, de logro ysatisfacción de hallarse en Quito, de sentirse miles y miles, desafiando el frío,durmiendo en el parque, en medio de la calle o en las gradas encementadas delAgora de la Casa de la Cultura o de la Universidad ,las tomas de Quito, se volvieron una rutina cada vez mas frecuente, al igualque las mesas de diálogos con altos funcionarios del Gobierno de turno, que ala vez pasado el susto y la impresión del feroz levantamiento, tornaban a echarabajo las mas crueles mediadas económicas y procedían a dar largas a las otrasreclamaciones interpuestas.

Luego el gobierno aprendió que la posibilidad de parar ellevantamiento, era la negociación con la fuerza mas organizada y combativa deeste, el movimiento indígena de Cotopaxi, de Chimborazo, de esta manera a travésde múltiples ofertas y compromisos con gobiernos seccionales a nivel prefecturale incluso cantonal el levantamiento se refrenaba o incluso una vez avanzado,algunos acordaban de manera unilateral su retirada.

Luego, en medio de la peor crisis financiera del país, unsector de militares decide hacerse con el poder, hay varios niveles de complot,desde las mas altas esferas del generalato, hasta oficialidad de grado menor delas Academias de Guerra de la capital, para ellos el pivote central es lacapacidad de convocatoria, autoridad moral, movilización y decisión de lucha queha demostrado la CONAIE ,no faltan a si mismo los intereses ególatras de contados dirigentes indígenasque se sienten omnipotentes gobernantes, así el complot fragua con el mando delos coroneles quienes acuciosos consiguen interesar a Antonio Vargas, dirigenteamazó nico de la CONIAE quien luego de dos períodos en la dirigencia de la CONAIE ha alcanzadorenombre y reconocimiento no solo en su región sino entre los indígenas de lamisma Sierra.

Así le resulta fácil pintar un cuadro de posibilidad deacceder al gobierno de mano de los coroneles... una historia larga de contar,pero que termino en Carondelet con un triunvirato, en el que se incluía elPresidente de la CONAIE ,y que duró dos horas.

Este amplio recuento para dar cuenta de la baseestructural de carácter social y económica que jalona la lucha de los pueblosindígenas que ha devenido eminentemente política, así luego del susto del 21 deEnero es fácil reestructurar los lazos de unidad y lanzarse a la toma del poderpor la vía electoral en alianza con el Crnl. Gutiérrez, lo otro ya es historiareciente. ..

De esta manera a pesar del desconcierto dejado por latraición de Gutiérrez, la CONAIE acumula un gran reconocimiento político, y debido a losólido de sus estructuras comunitarias, de la permanencia de un liderazgohistó rico a nivel nacional y provincial, se da la rápida recomposición de susfuerzas, que le permite nuevamente liderar la oposición al TLC.

Vista en esta dimensión, la CONAIE es una estructura depoder, que incluso por encima del brazo electoral de esta - el movimientoPachakuti k - logra traspasar su dinámica socio-organizativa y reivindicativa, para convertirse en un poderoso movimiento de masas, que define losacontecimientos trascendentales en el escenario de la lucha política en elEcuador; lamentablemente este acumulado histórico no logra cuajar en unrespaldo electoral, no sólo por las deficiencias anotadas anteriormente de subrazo electoral, sino además por la misma estrechez de la así llamadademocracia representativa.

En estas condiciones la CONAIE , en las ultimas elecciones por decisión enmucho de sus bases decide jugarse a la defensiva, y evitar un desgastepolítico, ausentándose de la posibilidad de alianzas con fuerzas'extrañ as' al movimiento indígena y potencializar a sus propioscuadros y fortalecer sus propias estructuras, dejando de lado la alianzapropuesta por Correa.

Pero debido a la polarización de la contienda política, sucandidato Luis Macas sólo alcanza a reunir el acumulado histórico delmovimiento Pachakutik o su votación cautiva de aproximadamente 120.000 votos, locual relativamente es un éxito ya que se ubica por encima de los partidostradicional es e incluso de partidos populistas de acendrada raigambre.

El desfase de esta participación a la que se le dio unagran dosis de voluntarismo y que se la quiso homologar a la gesta de EvoMorales, dio paso a la desconstitució n de la dirigencia histórica de la CONAIE y el pedido de laremoción de los viejos cuadros por nuevos cuadros. En este escenario aparece JorgeGuamán, en calidad de segundo asambleísta nacional, liderando una alianza deúltimo momento con el partido Socialista Ecuatoriano, cuya votación nacional nollega a los 50.000 votos.

Paralelamente y apoyado en el mismo discurso deremozamiento de la dirección de la CONAIE aparece Marlon Santi, indígena kichwa amazónico, quelideró una dura pelea contra la ingerencia de empresas petroleras enterritorios Sarayaku. Luego de prolongadas negociaciones él se convierte en lafigura de consenso que posibilitaría de paso la unificación de la confederaciónregiona l amazónica, que quedo tremendamente fracturada por la labor agenciosade Vargas y Gutiérrez.

La CONAIE, seproponen como cometido estratégico recuperar la capacidad de interlocución almas alto nivel, como en los viejos tiempos, de tal manera que la apertura de la Asamblea Constituyente ,sería el escenario para instalar una mesa sobre la temática indígena, en lacual apalancarse. Pero nuevamente Alianza País, luego de igualmente habernegado la posibilidad de una representació n indígena directa en la Asamblea , vuelve a cerrarlas puertas, de por medio están como nuevos aliados de Correa, el sector blanco– mestizo que salieron del Pachakutik denunciando la “hostilización” por unallamada corriente indígenista, y que desde el momento se convierten en adversariosdel movimiento indígena; y, trazan un cerco alrededor de Correa, quien al igualque la inmensa mayoría de la población mestiza, muy poco entiende o no quiereentender de la reclamación de nacionalidad, territorialidad y autogobierno quehan venido planteando de manera explicita la dirigencia de los pueblosindígenas y que de manera implícita ha sido el proyecto de reconstitució n delas nacionalidades y pueblos a lo largo de la historia.

En estas condiciones, la mejor estrategia de Alianza País,en relación al movimiento indígena, es jugarse al clientelismo, que tan buenosresultados le dio a Lucio Gutiérrez, tan es así que por el hecho de haberarmado una red clientelar en su gobierno y haber entregado el bono de lapobreza, palas y picos y raciones alimenticias a miles de indígenas, hasta laactualidad su partido el PSP, permanece sacando altas votaciones en las zonasrurales de la sierra especialmente.

La posibilidad de la desconstitució n de un entramadoinstitucio nal de carácter paraestatal que a lo largo de los levantamientos haido consiguiendo la CONAIE ,sentó la primera voz de alerta al interior del movimiento indígena, mas aúncuando al momento la misma declaración de los derechos universales de lospueblos indígenas, avala ampliamente este proceso institucional de maneraautónoma y con presupuestació n estatal.

Un segundo elemento, es la ingerencia de las empresasmineras y petroleras en los territorios comunitarios e indígenas, avalados porla ley de minería del banco mundial y de la acuciosa gestión de funcionariosdel Estado así como de gobiernos entreguistas, que despiertan temores en cuantoa los impactos ambientales y el saqueo de valiosos recursos naturales renovablesy no renovables.

A pesar del mandato minero expedido por el AsambleaNacional, que permitirá la reversión del 75% de las concesiones otorgadas, lafalta de reglamento y la propuesta de estructuració n de una nueva ley deminería, ha servido de pretexto para una acuciosa labor de oposición a cargo deun ecologismo infantil, atrás del cual en muchos de los casos se esconde lamano de las mas grandes transnacionales ecologistas, que desde la década de los90 vienen disfrazando la labor del imperialismo norteamericano de apoderarse deinmensas reservas naturales, con la abierta política de “canje de deuda porterritorio” , la “venta de servicios ambientales” la “colonización ecoturistica” ,la “explotación sustentable del bosque”, etc.

A pesar de la buena 'perfomance' hasta ahoralograda por el Gobierno de Correa, su agenda agraria no aparece por ningúnlado, es fundamentalmente la visión economicista de asegurar un fuerte sectoragro-exportad or en la Costa ,lo que ha jalonado las acciones del gobierno en relación al sector agrario; asímedianos y pequeños agricultores han resultado beneficiados con créditos,asistencia técnica, semillas, y para mas luego posiblemente con una red deacopio y comercializació n; mientras a los sectores agrícolas de la Sierra , por no ser parte dela cadena de productos exportables, poca importancia se le ha concedido y masbien se han trazado líneas programáticas de forestación maderable y cultivosdedicados a la producción de biocombustibles.

Únicamente, en la última semana, se empieza a hablar de unarticulado constitucional que alentado sobre las necesidades actuales de dar “seguridadalimentarí a” al conjunto de la población nacional, se empieza a considerar laconformació n de un fondo de tierras, de las posibilidades de expropiación delas tierra incultas o que no cumplan con una función social o ambiental.

Entonces el entramado de desaciertos estaba echado y faltabasolo un pretexto para una declaratoria abierta de oposición al Gobierno, peroresguardá ndose con la posibilidad de mantener un nexo con la Asamblea a través deAlberto Acosta. Igualmente estando de por medio, la campaña electoral que seavecina, muchos de los nuevos líderes políticos del Pachakutik, ante el cierrede puertas de Alianza País, consideran de manera ilusa que la única opciónviable y posible de alcanzar representació n política es yendo a la oposicióndel gobierno, más aún en un escenario en el que el alto costo de la canastabásica familiar, se presta para la demagogia y el discurso fácil.

Incluso sectores del mismo PSP en el Parlamento hanbuscado solidarizarse con las reclamaciones indígenas, pero la posición de ladirigencia de la CONAIE al respecto a sido tajante al advertir que estos individuos no deben pisar nila acera de la CONAIE.

Pero llegado el caso, de que las bases especialmente delmayor movimiento indígena del Ecuador localizado en la región Sierra, decidieseun levantamiento, esta de por medio la decisión, en mucho de manera autónoma, queasuman las autoridades de los gobiernos seccionales, especialmente de Cotopaxiy Chimborazo; la situación de escasa atención tanto económica y política que seha dado a la población indígena por el mismo Correa, la crisis de los preciosde los alimentos, las reclamaciones sobre el territorio que aún no se revierte alas comunidades, la posible desconstitució n de las instituciones indígenas, lapoca representatividad popular de los miembros del gabinete de Correa y otrasautoridades locales, dan un escenario peligroso, para la toma de esta muyimportante decisión, pero como habíamos dicho al principio, el levantamiento enmucho es la fuerza espontánea de respuesta a medidas de shock o que afectengravemente a la base existencial de las comunidades indígenas (por ejemplo lapropuesta de ley de desarrollo agrario, que en mucho significaba laprivatizació n de las tierras comunales generó uno de los mas grandes ycombativos levantamientos de la época presente).

Las movilizaciones precedentes, de la CONAIE , fueron en mucho deapoyo a los cambios positivos que se estaban dando con el Gobierno de Correapero a la vez de posicionamiento de la propuesta propia de los pueblos indios.La escalada de precios de los alimentos, en medio de la fragilidad de laeconomía campesina – indígena, ya significo una movilización discontínua quepor un lado apoyaba a la política de Correa en relación a hacer frente a laarremetida colombiana – estadounidense, pero por otro lado busca hacer oir lavoz y exigencia de la demanda de la plurinacionalidad y el control sobre losprecios de los alimentos procesados por la industria.

La activa participación de los pueblos indígena enprácticamente 20 años de movilizaciones contínuas, ha generado un granacumulado de conciencia, un nuevo liderazgo comunitario y una aguda visiónpolítica, que ha hecho que se hayan dado mas aciertos que desaciertos en laconducción de este movimiento indígena, de ahí que las decisiones tomadas desdelas bases en mucho son acertadas y referenciales para la acción de millones deindígenas, campesinos y sectores sociales populares.

En escasas ocasiones ha habido manipulación de gruposinteresados al interior de las asambleas de dirigentes, como el caso de laspresiones de los llamados movimientos sociales, que en mucho de los casos hanbuscado instrumentalizar el levantamiento para hacerse con jugosos contratoscolectivos ; la burda manipulación de Antonio Vargas, que buscaba desde entoncesposicionars e electoralmente, llamando a un levantamiento indígena en septiembredel 2002, generó la ausencia completa de movilización y un duro revés a lapolítica de la misma CONAIE.

Otro de los factores que han pesado en la falta demovilizació n indígena en el llamamiento a levantamiento desde las dirigencias, ha sido el desconocimiento, desconfianza o agotamiento de esta forma de lucha,que fue visible igualmente en el llamado a levantamiento para enfrentar a laley Trole I y II, ante lo cual hubo escasa respuesta; la misma convocatoria aconfrontar al TLC hubo de requerir una tenaz labor de comunicación y difusiónde aproximadamente dos años, para que esto al final se concretara.

En el caso presente, de concretarse un llamado allevantamiento indígena, un escenario peligroso que podría devenir de ello, esque la derecha pretenda o pueda cabalgar sobre esta justa reivindicació n de lospueblos indígenas, para ello el gran aparato de los medios masivos decomunicació n ya se han puesto en marcha, cuando en anteriores ocasiones, habíaun cerco informativo cerrado ante los levantamientos que duraba inclusosemanas, ahora acuciosos los reporteros acuden a las comunidades a buscar lanoticia, aquella que precisamente les interesa, la de oposición al gobierno.

En su demencial necesidad de echar abajo los pocos cambiosque ha generado el Gobierno actual, pero que les ha significado perder poderpolítico y económico, la derecha oligárquica y neoliberal, podría generarcondiciones para una provocación a gran escala y con ello despertar la ira y elfuror indígena - campesino, no tanto para echar abajo el Gobierno, pero si paradebilitarlo e incluso a mas largo plazo dejar sin piso algunas reformasemprendidas , cuanto poner en peligro la ratificación de la Constituyente en elreferéndum de septiembre de este año.

Las noticias últimas dan cuenta que se continua con elespacio de dialogo abierto en relación con la declaratoria de plurinacionalidadde l Estado, enfocándose en el tema específicamente de la territorialidad, locual es parte sustancial de la propuesta de manejo compartido de los recursosnaturales por parte de los pueblos y nacionalidades indígenas. Para lo cualincluso se ha dicho por el mismo Correa, que el procedimiento sería estableceruna declaratoria de territorialidad sobre la base de la votación del 75% de lapoblación circunscrita en un padrón electoral.

Igualmente la posibilidad de la consulta y consentimientoprevi o, se podría igualmente regular, en diferentes instancias, por ejemplo através del mismo Codenpe, al cual igualmente el gobierno ha dicho se podríaconvertir en un superministerio indígena que establezca las necesarias planificacionesy coordinaciones de las instituciones indígenas en el marco del plan dedesarrollo del Senplades.

Esperamos que la madurez política de lado y lado permitael avance del proceso de cambio y transformació n de las estructuras políticas,econó micas y sociales del Ecuador entero.

Lautaro Villavicencio G.
Cuenca, 28 de mayo del 2008